jueves, 26 de febrero de 2009

Película "Historia de un detective" (1944) de Edward Dmytryk


Se trata de otra película que aparece en la selección de "1001 películas que hay que ver antes de morir" y que acabo de tener la suerte de ver. Su título original es "Murder, my sweet" aunque también se conoció en Gran Bretaña como "Farewell, my lovely" por ser ese el nombre de la novela de Raymond Chandler en que está basada. En estos años 40 estaba muy en auge el llamado cine "negro", que simplificando mucho eran las típicas historias detectivescas pero con fuerte carga de denuncia social y con menos importancia de la posible solución final al enigma. En ese mismo año, 1944, se estrenaron otras dos grandes cintas de este género como "Laura" de Otto Preminger o "Perdición" de Billy Wilder. En esta película aparece el famoso detective "Philip Marlowe" interpretado por Dick Powell de una forma más insolente y agresiva que la que luego veremos en el actor Humphrey Bogart, que lo caracteriza más desengañado e irónico. En realidad esta primera película está más cerca del auténtico protagonista de tantas novelas de Raymond Chandler. La atmósfera del filme es realmente fascinante y obtiene excelentes resultados a pesar de la apariencia de estar hecha con pocos medios, algo bastante generalizado en este tipo de cine que empezó siendo concebido como un producto de "Serie B" pero que acabó aportando una gran cantidad de obras maestras.

domingo, 22 de febrero de 2009

Trilogia "Millennium" de Stieg Larsson


Uno de los grandes éxitos de ventas en España del pasado año fueron los dos primeros libros que formarán una trilogía del autor sueco Stieg Larsson cuando se publique el tercero. Cuentan casos diferenciados con lo que se pueden leer independientemente; es más, con uno que se lea ya es suficiente salvo para "fans" del autor. El último se publicará antes del 23 de abril para que esté listo en ese día de Sant Jordi, de tantas ventas en algunos lugares. En otros países ya se han publicado como vemos por las portadas de arriba. Los títulos aquí serán definitivamente: "Los hombres que no amaban a las mujeres", "La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina" y "La reina en el palacio de las corrientes de aire". Particularmente creo que se han sobrevalorado mucho ya que no dejan de ser bastante tópicas, con estereotipos bastante manidos (el detective no profesional que es más competente que la policía, la joven hacker inadaptada y antisistema...) Larsson no cumple lo de "lo bueno, si breve, dos veces bueno" y creo que cada una de las novelas se podía haber solucionado con la mitad de páginas (700 son demasiadas para una novela policíaca que tampoco propone nada especial para justificarlo) Para rellenarlas se vale del típico recurso de dejar la trama en constante "suspense" y de varias narraciones paralelas yuxtapuestas. También es cierto que el marco social que propone es muy interesante y la trama detectivesca sirve de crítica a la prostitución, al neonazismo o a la corrupción general imperante hoy en día (algo que de todas formas no es tampoco novedoso como pretenden algunos y si no, véase la literatura "negra" de Raymond Chandler o Dashiell Hammett). A favor de su persona hay que reconocer su valentía ya que escribió bajo amenazas. El retrato tan realista y crítico que propone le acarreó problemas, concretamente de grupos neonazis, hasta tal punto que limitó mucho sus apariciones públicas y tampoco celebró una boda con su pareja por temor a llamar la atención de sus amenazantes. Hay que lamentar, por otra parte, su fallecimiento en 2004, al poco de terminar la tercera novela, aunque nada tienen que ver las amenazas antes descritas ya que murió por un ataque al corazón. Dentro de ese aire realista aparecen también algunos personajes homosexuales como la misma protagonista, bisexual después de leer la segunda obra, que se marca diversas escenas eróticas con una lesbiana y algún que otro trabajador de la revista "Millennium" que da nombre a este proyecto. Por todo lo dicho anteriormente parece que me hayan parecido mediocres pero no es del todo así. De haberlas leído sin tanta crítica positiva, tanta recomendación y tanta invasión en las librerías, seguramente las hubiera encontrado interesantes pero tengo una cierta tendencia a relativizarlo todo para hacer un ejercicio de contrapeso y que no se den situaciones exageradas hacia un lado o hacia otro. En resumen, esta trilogía (por las dos partes que he leído) es una obra interesante y recomendable para aficionados de la novela policíaca y también para aquellos que buscan una buena trama y una historia medianamente bien escrita (que para lo que corre hoy en día por ahí, no es poca cosa).

miércoles, 11 de febrero de 2009

Película "La séptima víctima" (1943) de Mark Robson



En un libro titulado "1001 películas que hay que ver antes de morir" aparece este filme y nos lo presenta como insólita para los años 40 por diversas razones. Entre ellas está la de tener "un grupo de lesbianas (no todas ellas antipáticas)". Evidentemente busqué esta película por mi interés por toda representación de personajes homosexuales en el cine. He de decir que no he visto ese "grupo de lesbianas" aunque hay una cierta insinuación de que uno de los personajes secundarios femeninos está enamorado de una de las protagonistas. De todas formas, por esas fechas todo estaba muy velado y podemos ahora recordar filmes famosos de esos años como "Rebeca" (1940) de Alfred Hitchcock, donde la criada de la Mansión Manderley está ya plenamente reconocida en casi todos los libros como un personaje lesbiano, sin que haya realmente evidencia muy explícita de ello. Es un nuevo descubrimiento que no quedó reflejado en mi libro "El celuloide rosa" pero para eso disponemos de este blog y también queda anotado para futuras actualizaciones del libro, si las hubiera. El texto de la crítica no es, por tanto, del todo inexacto pero hay que tener cuidado en general con los escritos promocionales, las críticas o las mismas sinopsis en las carátulas de los dvd's. En el estuche de esta película en conccreto nos encontramos con la frase "Cabe recordar una terrorífica escena con un asesinato en una ducha, veinte años antes que Psicosis". Esto es totalmente falso ya que no ocurre tal asesinato. Sí hay una escena en la que la protagonista se está duchando y aparece una silueta misteriosa tras las cortinas que le exige que se marche de la ciudad y no siga investigando la desaparición de su hermana. Es una escena inquietante y por ese motivo sí está algo relacionada con "el maestro del suspense" Alfred Hitchcock. Ya que lo hemos mencionado un par de veces, el aire fantasmal y sugerido de "La séptima víctima"y las amenazas de oscuras sociedades secretas me ha recordado también a muchas de las primeras películas de Hitchcock como "Alarma en el expreso" "39 escalones" o "Enviado especial". Por todas esas asociaciones de ideas tal vez tengamos que hablar pronto de él en este blog.

sábado, 7 de febrero de 2009

Libro "El monestir de l'amor secret" (2008) de Maria Dolors Farrés.

Ya que en la entrada anterior hablé de la película "Extramuros" con una historia de amor entre dos monjas y recordé el film "El nombre de la rosa", tengo que comentar una novela catalana que leí en diciembre y que tiene mucha relación. En este caso hay una pasión entre dos monjes mucho más fuerte, e incluso la autora se recrea en escenas de sexo explícito (felaciones, penetraciones...) aunque no la malinterpretemos como pornográfica ya que son momentos puntuales y pertinentes con el realismo que pretende. Las dudas religiosas, el sentimiento de culpa y las relaciones de poder dentro del convento son temas que recorren sus páginas acompañando a la tensión sexual aludida. De hecho la homosexualidad no es exclusiva de los dos personajes principales y se extiende a otras personalidades religiosas que aparecen en el libro. El contexto histórico elegido refuerza la sensación de "duda" porque nos situamos en el siglo XIV, un momento donde los clérigos ven venir casi el fin del mundo por un cisma católico que les obligará a elegir entre el Papa de Roma o el de Aviñón. Aunque no es el objetivo de la autora, nuestra lectura da mucha importancia a la temática gay y además nos congratula que sea otra obra que refuerce la opinión de la hipocresía de la Iglesia, cuando condena como "antinatural" algo que sus miembros vienen practicando de manera muy natural desde la época medieval, en la que por cierto sigue anclada. Aparte de estas lecturas más interesadas (que para eso estamos en el blog "El Celuloide Rosa") es una gran novela que se lee como una buena intriga histórica y tiene un ritmo que la hace incluso futurible para el cine. Sería una gran noticia aunque quizás para ello merece traducción a otros idiomas para darse a conocer. A ver si eso sucede pronto.